31 diciembre 2007

BUENOS AUGURIOS, SALUD, TRABAJO Y ÉXITO PARA ESTE 2008

Queridos amigos y amigas del Blog de Critica Arqueológica Boliviana, les deseo mis mejores augurios de salud, trabajo, paz en sus hogares y éxito en su vida profesional, principalmente a todos los colegas arqueólogos bolivianos y extranjeros que amamos investigar el pasado prehispánico o contribuir a difundir este conocimiento entre toda la gente.
Deseo sinceramente que el 2008 sea un mejor año para la arqueología boliviana, que tengamos buenas noticias y resultados que nos animen a continuar en el dificultoso transitar de la investigación y el desarrollo de proyectos culturales. Que aprobada o desaprobada la nueva constitución, la arqueología y los profesionales que trabajamos en ella podamos fortalecer nuestras instituciones, mejorar nuestras capacidades personales y enfrentar nuevos y mas exigentes proyectos, en la perspectiva de un destino mejor para la investigación, la protección y aprovechamiento del patrimonio arqueológico de los bolivianos.
Deseo que este año que viene sea en inicio de cambios estructurales y crecimiento de la Unidad Nacional de Arqueología; que salga por fin a la luz una Ley de Patrimonio Cultural, Que se generen políticas públicas a favor de nuestra disciplina; que la UNAR y todos los arqueólogos que, de una u otra forma, estamos ligados a ella o instancias de investigación universitaria, podamos trabajar juntos para fortalecer la practica profesional, la investigación, la protección del patrimonio, su aprovechamiento y su difusión.
Que el Instituto de Investigaciones Arqueológicas y Antropológicas de la UMSA tenga un golpe de timón y enrumbe a la investigación universitaria a derroteros más promisorios; que la Carrera de Arqueología rearticule sus fuerzas y recursos para formar arqueólogos con verdadera capacidad, vocación y pasión por la práctica arqueológica (no sólo la investigación); que el próximo año mucho mayor número de arqueólogos puedan titularse con tesis que los enorgullezca, sin apelar a reciprocidades dañinas o al favor de nadie.
Siento que este será un gran año para otras entidades que hacen arqueología en el país, que como el Museo Arqueológico de la Universidad de San Simón, no esperan que el destino les de buenos tiempos, sino que lo trabajan a pulso y con mucho coraje.
Finalmente, tengo la esperanza de que este año la SALP tenga un trabajo más unido y coordinado, que se fortalezca con nuevos proyectos, consolide la participación de más y mejores arqueólogos y se constituya como una organización referente y representativa de quienes aman y trabajan por la arqueología.
Que este año 2008 sea un año de unión y reencuentro de todos quienes trabajamos en arqueología y/o tenemos que ver algo con el patrimonio prehispánico de los bolivianos.

11 diciembre 2007

EL PATRIMONIO ARQUEOLÓGICO EN LA PROPUESTA DE CONSTITUCIÓN

¿Como se considera el Patrimonio arqueológico en la actual Constitución Política del Estado?

Constitución Política del Estado, Ley Nº 2650, Ley de 13 Abril de 2004
Parte Tercera. Regímenes especiales
Título Cuarto. Régimen Cultural

Artículo 191
I. Los monumentos y objetos arqueológicos son de propiedad del Estado. La riqueza artística colonial, la arqueológica, la histórica y documental, así como la procedente del culto religioso son tesoro cultural de la Nación, están bajo el amparo del Estado y no pueden ser exportadas.
II. El Estado organizará un registro de la riqueza artística, histórica, religiosa y documental, proveerá a su custodia y atenderá a su conservación.
III. El estado protegerá los edificios y objetos que sean declarados de valor histórico artístico.

¿Que dice la Constitución Política del Estado aprobada en grande por la Asamblea Constituyente de Bolivia en Sucre el 24 de Noviembre de 2007 ?

Primera Parte. Bases fundamentales del Estadio. Derechos, deberes y garantías
Título II. Derechos, deberes y garantías
Capítulo Sexto. Educación e interculturalidad
Sección III. Culturas

Artículo 101
I. El patrimonio cultural del pueblo boliviano es inalienable, inembargable e imprescriptible.
II. El Estado garantizará el registro, protección, conservación restauración, recuperación, revitalización, enriquecimiento, promoción y difusión de su patrimonio cultural, de acuerdo a la ley.
Artículo 103
Las manifestaciones del arte y las industrias populares, en su componente intangible gozarán de especial protección del estado. Asimismo, disfrutarán de esta protección, los sitios y actividades declaradas Patrimonio Cultural de la Humanidad, en su componente tangible e intangible
Artículo 299
Las siguientes competencias se ejercerán de forma concurrente por el estado plurinacional y los departamentos, con sujeción a las políticas estatales, y de acuerdo con la Ley:
..........
10. Cultura

Tercera parte: Estructura y organización territorial del Estado
Título I: organización Territorial del Estado
Capítulo octavo: Distribución de competencias

Artículo 300
Son competencias de los gobiernos de los departamentos autónomos, en su jurisdicción:
7. Promover y proteger el patrimonio cultural, histórico, artístico, arquitectónico y arqueológico, tangible e intangible, así como el patrimonio natural, de manera exclusiva o en concurrencia con los gobiernos municipales y entidades territoriales indígena originario campesinas, y con el Estado plurinacional.

Artículo 301
I. Son competencias de las regiones autónomas en su jurisdicción:
.....................
9. Apoyo en la ejecución de planes, programas y proyectos de salud, educación, cultura, ciencia y tecnología.

Artículo 302.
I. Son competencias de los municipios autónomos, en su jurisdicción:
.......................
19. Conservar y promocionar del patrimonio tangible e intangible, los sitios sagrados, los centros arqueológicos y los museos.

Artículo 304

I. Los territorios indígenas originario campesinos asumirán las competencias de los municipios y regiones según sus estatutos, de acuerdo a un proceso de desarrollo institucional y a las características culturales propias, y de conformidad a la Constitución y a la Ley Marco de Autonomías y Descentralización.

5. Resguardar derechos intelectuales colectivos, referidos a conocimientos de recursos genéticos, medicina tradicional, germoplasma y patrimonio cultural tangible e intangible.

6. Fomentar y promover las culturas, el arte, la identidad, los centros arqueológicos y los museos

Capítulo VII
Biodiversidad, Amazonía, Coca, Areas Protegidas y Recursos Forestales
Sección IV: Areas Protegidas

Artículo 386
I. Las áreas protegidas son un bien común y forman parte del patrimonio natural y cultural del país; cumplen funciones ambientales, culturales, sociales y económicas para el desarrollo sustentable.

II. En las áreas protegidas donde exista sobreposición de territorios indígenas originario campesinos, la gestión y administración de las áreas protegidas se realizará en sujeción a las normas y procedimientos propios de los pueblos y naciones indígenas originarias campesinos, respetando el objeto de creación de estas áreas.

ALGUNAS OBSERVACIONES

Se incorpora el concepto de “Patrimonio Cultural” “Patrimonio Cultural Tamgible” y “Patrimonio Arqueológico”
Se elimina el concepto de “Riqueza”
Se elimina la propiedad del Estado respecto del “patrimonio Cultural” y de “monumentos y objetos arqueológicos”
Se incorpora el concepto de “pueblo boliviano”
Se incorpora la responsabilidad del estado para garantizar el “enriquecimiento” del Patrimonio (lo cual no es muy entendible)
Se establece la protección particular del Estado a los sitios declarados Patrimonio Cultural de la Humanidad sin mencionar los monumentos nacionales
Se incorporan competencias explícitas sobre el patrimonio arqueológico para los Gobiernos Departamentales , Regiones Autónomas, Gobiernos Municipales y” Territorios Indígenas Originario Campesinos”
No se explicita que se quiere indicar con fomentar y promover los Centros Arqueológicos
Se explícita que las áreas protegidas forman parte del Patrimonio Cultural del país y que estas cumplen funciones culturales

28 octubre 2007

LA PREFECTURA NECESITA ARQUEOLOGOS


Desde hace algunos meses la Precetura de La Paz ha tratado de adjudicar una serie de proyectos y trabajos que involucran la participación de arqueólogos, en especial para la ejecución de un estudio de prefactibilidad en Iskanwaya y para la habilitación de campos elevados agrícolas demostrativos en el sitio de Tiwanaku. Lamentablemente varias de las convocatorias fueron declaradas desiertas, primero debido al elevado requerimiento de meritos profesionales para los arqueológos componentes de los equipos de trabajo; luego por la exigencia desmesurada de los términos de referencia en relación al monto presupuestado. Todo ello sumado a las debilidades que tiene esta institución para poder evaluar las propuestas con la suficiente capacidad técnica.
Es bueno recordar que ninguna o casi ninguna empresa consultora actualmente en el mercado, cuenta con experiencia institucional en trabajos de arqueología, dado que muy pocos trabajos se mueven por esta vía. Lo ideal hubiera sido identificar fundaciones u ONGs que trabajen en el tema cultural para poder llegar a acuerdos o convenios, o en su defecto solicitar el apoyo de instituciones con especialización en la temática como la Universidad Mayor de San Andrés o la SALP.

16 octubre 2007

KONCHAMARKA Y LAS FALSAS ESPECTATIVAS DEL TURISMO CULTURAL

El año 1992, el arqueólogo Willy Pantoja, visitó el sitio de Konchamarka y escribió un artículo para la revista Nuevos Aportes con datos aclaran muchos de los hechos sucitados recientemente. Pantoja indica que Konchamarla es uno de los sitios arqueológicos de altura más interesantes por su estratégica ubicación y su belleza paisajística, que fue edificada con características típicas de los patrones constructivos tiwanakotas, destacándose una serie de plataformas que conforman un conjunto ceremonial. Relata que en 1948 Raúl López Videla las reportó en el libro del IV centenario de la fundación de La Paz y que en 1976 se hicieron las primeras labores de estudio en el sitio, previa limpieza de malezas. En aquella oportunidad se estimó que el conjunto tenia cerca a 4.000 m2 y que en la tercera plataforma los campesinos de la zona de Konchamarka y vecinos de la región de Yaco habian realizado excavaciones clandestinas, hallando material cerámico y ubicando una cuarta plataforma. Los mismos campesinos indicaron haber encontrado un monolito de 50 cm de altura y una vasija completa. Estas tareas pioneras fueron efectuadas por Oswaldo Rivera y Danilo Kuljis del ex- INAR.
En 1973 Angel Galias Montero ya había advertido en una publicación aparecida en el períodico "El Diario" sobre la forma en la que los comunarios del lugar afectaban el sitio: "Desmantelan ruinas inkaicas recientemente descubiertas en busca de tesoros ocultos"..."las ruinas descubiertas en la localidad de Konchamarka estan siendo desmanteladas por los campesinos de Yaco..."
Estos datos nos indican que la actividad depredatoria de los campesinos de Konchamarka no es nueva. Sin embargo, la descripción periodística que nos da La Razón, es realmente desoladora, pues el hecho de que José Estevez (que ya dio referencias de este sitio en 1988), se consternara por lo visto en Konchamarka, da una idea de la magnitud de los destrozos cometidos.
A finales del año pasado, los comunarios estuvieron de paso por La Paz, tratando de promover a Konchamarka como un reciente y extraordinario descubrimiento arqueológico. Sus relatos e imágenes impresionaron fuertemente a algunos despistados e ingenuos comunicadores como John Arandia y convencieron al oportunista prefecto de La Paz, Jose Luis Paredes para que declarará el lugar como Patrimonio Turístico de La Paz y prometiera todo tipo de proyectos para el lugar.
Lamentablemente, ni la prefectura, ni el Viceministerio de Cultura o los arqueólogos, entre los que me cuento, hicimos nada al respecto, especialmente despues de ver en el programa del aludido John Arandia, como los campesinos saqueaban el sitio a la vista y paciencia de los camarógrafos. Lo penoso es que el periodista, en su ignorancia, en vez de censurarlos los alentaba en su cometido.
Consultando a las autoridades sobre los daños a Konchamarka, se nos dijo que se esta tomando acciones legales en contra los responsables, lo cual es muy ponderable, pero no suficiente. Se requiere inmediatas acciones para precautelar este sitio y estudiarlo antes de que se pierda irremediablemente para el registro y pasado prehispanico. De manera simultanea debemos emprender tareas de concientización, sensibilización y educación respecto del cuidado del patrimonio arqueológico entre los comunarios de Yaco y Konchamarka y tener en claro con este ejemplo, lo delicado que puede ser generar espectativas de turismo en comunidades campesinas que ignoran completamente lo que pueden o no pueden hacer con los vestigios del pasado.
Foto: Pedro Laguna de La Razón

06 julio 2007

DE TORPES Y TORPEZAS EN PUMAPUNKU

A principios de enero del 2007 la Sociedad de Arqueología de La Paz (SALP), recibió una denuncia de parte de un guía de turismo que alertó sobre los destrozos que se estaban cometiendo en Pumapunku debido al deficiente trabajo desarrollado por los responsables de la UNAR en este monumento. Una comisión de la SALP se trasladó a Tiwanaku para verificar estas denuncias, lo cual derivó en un informe técnico que validó muchas de las observaciones efectuadas por el guía y promovió una denuncia oficial y directa de parte de la Sociedad de Arqueología sobre los daños acontecidos al patrimonio arqueológico de Pumapunku como efecto de la implementación de los trabajos implementados por la UNAR. A la fecha, no existe una respuesta a esta denuncia, no se han iniciado las investigaciones pertinentes que obligan la Ley SAFCO 1178 (DS 23318 – A, Cap VI, Responsabilidad penal), el cumplimiento del Artículo 14 inciso (a) del Reglamento de Excavaciones ni el artículo 223 del código penal sobre delitos de destrucción o deterioro del bienes del Estado y la Riqueza Nacional. A seis meses de esta denuncia el actual Director de Patrimonio como los dos últimos Viceministros de Desarrollo de Culturas han cerrado filas para encubrir estos hechos soslayando sus responsabilidades para con la cultura y el patrimonio arqueológico, anteponiendo sus intereses personales y políticos, pues tanto los trabajos de Pumapunku como de Akapana se sostienen en sustanciosos montos provenientes de la donación de importantes empresas privadas.
Uno de los principales reclamos de la Sociedad de Arqueología de La Paz era que la UNAR hiciera público el proyecto con el cual estaba trabajando, este documento parece ser el secreto mejor guardado de la UNAR, pues ni el Viceministro y el Director de Patrimonio lo conocen (Tal como lo manifestó el actual Director de Patrimonio). Dos consecutivas intervenciones del Defensor del Pueblo en este caso tampoco pudieron extraer ninguna respuesta ni documentación acerca del proyecto que tienen lugar en Pumapunku.
Desde su inicio las tareas en Pumapunku han sido observadas por la ligereza con la que fue emprendido. El tiempo nos permite observar muchas de las torpezas y desatinos, evidentes e inferibles, cometidos por sus auspiciadores y responsables:
1. Primera torpeza: Las acciones en Pumapunku parecen no tener un proyecto con racionalidad arqueológica
2. Segunda Torpeza: Se emprendieron tareas de reconstrucción y conservación sin contar con una línea de base de trabajo, registro detallado de las piezas y sus posiciones al inicio del trabajo, ni una planificación adecuada para su traslado y posterior “armado”.
3. Tercera torpeza: El movimiento de piezas fue improvisado, como quien juega con un rompecabezas, tratando de ver que pieza ensambla con otra, cuando lo mas apropiado era hacer estas pruebas de simulación en computadora y establecer un cuidadoso plan de traslado una vez que estas posiciones hubieran sido identificadas con la más absoluta certeza.
4. Cuarta torpeza: Colocar como responsables a quienes no solamente no cuentan con la formación, licencia y capacidad para desarrollar estos trabajos, sino son el personal con menor calificación dentro de la UNAR para este cometido.
5. Quinta Torpeza: No contar con el personal ni los recursos mínimos para emprender tales labores, especialmente conservadores especializados, ingenieros experimentados en este tipo de trabajos, equipos y maquinaria adecuada, etc.
6. Sexta Torpeza: Haber trabajado en temporada de lluvia, emplear barretas metálicas para mover los litos y gatas para levantarlos: Varias piezas han sido quebradas y desportilladas por tamaña irresponsabilidad.
7. Séptima torpeza: Haber descuidado totalmente la conservación de otros restos materiales encontrados en Pumapunku. Mantener rasgos arqueológicos a medio excavar, exponiéndolos a la lluvia y a la inclemencia del tiempo sólo para que la prensa los pudiese fotografiar. Precio que Huari y la Fundación Wiñaymarca reclamaron para su publicidad institucional.
8. Octava torpeza: Mostrar a la prensa canales de desagüe de la estructura haciéndoles pensar que eran “túneles” que llevaban a “tesoros” o al sarcófago de algún “faraón” Tiwanakota, haciendo ostensible cuan seria es la actividad arqueológica que desarrolla la UNAR y sus “Arqueólogos”, licenciados sólo por tal institución, pues la UMSA no los reconoce como arqueólogos profesionales.
9. Novena torpeza: Haber expuesto a los trabajadores a innumerables riesgos en el movimiento de los litos, pues ninguno y en ningún momento contaban con los medios adecuados para tales trabajos. Esto también transgredió las regulaciones de la Ley del Trabajo.
10. Décima Torpeza: Cuando la SALP transmitió a la UNAR una primera preocupación por los acontecimientos en Pumapunku , pidiendo que se investigue internamente la veracidad de las denuncias hechas por un guía de turismo, recibió como respuesta la agresión física de uno de sus responsables en el trabajo de Pumapunku (probablemente el más torpe) a uno de los miembros de la Junta Directiva de la SALP, en las propias instalaciones de la UNAR y ante la vista y paciencia de su Director (o Jefe), el cual, junto a las autoridades del Viceministerio apañaron (o talvez fomentaron) esta acción brutal, dando otra vez una muestra acerca del grado de delicadeza con el que se maneja el trabajo en Pumapunku, o en general, la arqueología nacional.
11. Décimo primera torpeza: Las autoridades del Viceministerio de Culturas han evadido sistemáticamente responder a la denuncia, inventando todo tipo de excusas para no cumplir con los compromisos de palabra hechos por su Director de Patrimonio frente a la SALP, al Alcalde de Tiwanaku, a representantes de los trabajadores de Tiwanaku y responsables de la UNAR. Esta actitud ambivalente no ha hecho más que profundizar el problema y hacer evidente la falta de capacidad de esta autoridad para, no sólo responder a las demandas que entraña el puesto, sino para formular un mínimo de políticas coherentes en el tema arqueológico.
12. Décimo segunda torpeza: Pensar que intimidando a los responsables de los proyectos internacionales para que no consideren dentro de sus equipos de investigación a los arqueólogos asociados a la SALP van a lograr evitar que se destapen todos los intereses y malos manejos (no sólo técnicos ) que se esconden tras estos proyectos.
13. Décimo tercera torpeza: Que tanto el Viceministerio como su Dirección de Patrimonio han jugado con la voluntad, tiempo y trabajo de los abogados y responsables del Defensor del pueblo, evadiéndolos o contándoles mentiras respecto del problema o los intereses que giran en torno a Pumapunku.
Lamentablemente, aparte de la SALP, parece que a ninguno de los actores involucrados - directa o indirectamente - le interesa la salud del patrimonio arqueológico de Pumapunku ni de Tiwanaku, cada una de las cuales (“Mallkus”de Tiwanaku, Alcalde, Vecinos, Estudiantes de Arqueología, UMSA, Instituto de Investigaciones Arqueológicas y Antropológicas, Fundaciones Culturales, etc.) se ha mostrado indiferente ante estos atropellos contra el patrimonio arqueológico, las instituciones que las defienden y los propios arqueólogos que reprochan o denuncian tales hechos.

Se recalca que las opiniones vertidas en este texto son de absoluta responsabilidad del autor e independientes de las instituciones aludidas

14 abril 2007

EL INSTITUTO DE INVESTIGACIONES ARQUEOLOGICAS Y ANTROPOLOGICAS (IIAA) DE LA UMSA: PREGUNTAS PARA EVALUAR Y MEJORAR

ALGUNAS PREGUNTAS QUE NOS TIENEN QUE AYUDAR A REFLEXIONAR SOBRE LAS ESPECTATIVAS Y REALIDADES DEL IIAA:

¿Es el IIAA referente de la investigación arqueológica en algún lugar de Bolivia?¿Existe apertura a nuevos investigadores en el IIAA?¿Que tipo de evaluación existe respecto al desempeño de sus investigadores?¿Que resultados positivos han generado las distintas gestiones que han estado a cargo en el IIAA para el logro de los objetivos de la institución? ¿Son satisfactorios estos logros en relación a todo lo que pudo lograrse?¿En estos 6 años, el IIAA crecio o se achico en infraestructura?¿Su equipamiento esta acorde a lo que se podia o esperaba?¿Se pudo lograr mejores resultados en equipamiento?¿Los equipos e infraestructura se administran adecuadamente?¿Que resultados existen en la gestión en acuerdos y vinculos de investigacióncon otras instituciones nacionales y extranjeras?¿Que nuevos acuerdos o convenios de investigación se tienen a largo plazo aparte del ASDI/SAREC?¿las investigaciones estan siendo ejecutadas con la rigurosidad metodológica que demanda la disciplina?¿Las investigaciones de campo han sido eficientes en función a los recursos económicos, físicos y humanos?¿Es eficiente la administración de todo el proyecto ASDI y el propio instituto?¿La producción intelectual de los investigadores esta acorde con lo investigado?¿Se esta produciendo acorde con lo esperado?¿Se esta utilizando todos los recursos posibles para producir o difundir lo que hace o produce el IIAA?¿Los investigadores publican en las revistas especializadas de la carrera o de otra entidad nacional o internacional?¿Es satisfactorio el desempeño de estos investigadores en los eventos nacionales e internacionales de arqueología?¿Existe una adecuada coordinación de los investigadores y de las investigaciones que realizan?¿La carrera minitorea o hace algun seguimiento de desempeño o resultados sobre el IIAA?¿Toma medidas al respecto?¿Se difunden adecuadamente los resultados o evaluaciones que pudiera estar haciendo la carrera respecto del desempeño del IIAA?¿Que tipo de dirección lleva adelante la carrera en relación al IIAA?¿Se cumplen las funciones mínimas de Planificación, Dirección, Ejecución , Control y Motivación por parte de la Carrera y el IIAA?¿Cuales son las políticas de la carrera en relación al IIAA y a la investigación arqueológica en general?¿Los investigadores del IIAA estan satisfechos y motivados con el trabajo que realizan y sus condiciones institucionales?¿Cual es el impacto a nivel de investigación y docencia que han tenido los doctorados y masterados que tienen el IIAA y la Carrera?¿Se puede decir que el nivel de calidad de las investigaciones ha subido?¿Se puede decir que el nivel académico de los arqueólogos egresados ha subido?¿Que motivación o incentivo existe en la carrera y el IIAA para la gente que se capacita en el exterior?¿Existen politicas en el IIAA o en la Carrera de Arqueología para captar o incentivar a profesionales que se han formado para investigar?¿El proyecto del IIAA es sobresaliente en el ámbito de la cooperación del ASDI/SAREC?¿Se manejan los fondos de manera eficiente?¿Se ejecuta todo lo que se programa?¿Se ejecutan bien todos estos recursos?¿Cual es el balance entre recursos invertidos y resultados obtenidos?¿Se manejan adecuadamente los inventarios de materiales arqueológicos?¿El IIAA cumple con las leyes y reglamentos del Estado en relación a permisos e informes de sus investigaciones con la UNAR?¿La UNAR supervisa los proyectos del IIAA?¿Cual es la opinión de las dirigencias comunales en relación a lo hecho por el IIAA hasta ahora?¿Que tipo de informes se entrega a las comunidades?¿Que acciones de difusión de los resultados hace el IIAA en las comunidades?¿Se ha trabajado en el análisis de material y en la producción de resultados tanto como se ha salido al campo?¿Como se evaluan los museos apoyados por el IIAA en estas comunidades?¿Existe transparecia técnica y financiera en el IIAA?¿Que utilidad ha reportado el proyecto del IIAA a las comunidades hasta ahora? ¿Esta normado el procedimiento para el manejo de recursos por los servicios que brinda el IIAA?¿Como se eligen los consultores o personal que interviene en estos servicios?¿A quien benefician los convenios del IIAA, a alunmos, a docentes, a la carrera?¿Que recibe el IIAA de los convenios con otras instituciones?¿Es pertinente a nuestra realidad un IIAA tal como esta funcionando ahora?

05 abril 2007

AKAPANA Y EL NEONACIONALISMO INDIGENA






¿Como fue Akapana hace 1.600 años?¿Que moviles ideológicos y políticos promovieron su coinstrucción?¿Quienes lo construteron?¿Cuantos o en que tiempo?¿Que acontecimientos políticos, económicos o sociales acontecieron mientras duró su construcción?. Son preguntas que estan demás, eso ya no es importante. Lo importante es como lo soño algun arqueologo o arquitecto (o ambos) y como esta idea fue comprada por políticos, empresarios, burócratas, banqueros o dizque intelectuales.

Hoy este sueño esta haciendose realidad gracias al cemento de SOBOCE, los 5000 sillares de la Prefectura, la vista gorda de la UNESCO, el trabajo de muchos novisimos estudiantes, algunos pocos arqueólogos y el "proyecto" fantastico elaborado por un grupo de funcionarios administrativos que poco o nada saben de arqueologia.

Tiwanaku será así la gran waca del mundo andino que desearon los políticos del cambio, los elucubradores de la cosmovisión andina y quienes añoran el retorno del mítico Tawantinsuyu.

Probablemente algunos de nuestros constituyentes piensen en la Pirámide como un símbolo de la nueva sociedad que traera consigo la constitución de Bolivia. Nada más errado, pues tarde o temprano verian que lo que se hizo de Akapana fue fruto de una mala percepción de la evidencia del pasado, que fue forzada en su reconstrucción (restauración), que tras algunos pomposos ritos con coca y mucho alcohol, sólo sirvió para que nuevamente se subieran en ella todo tipo de gringos, la pisotearan a placer y dejaran a cambio algunos pocos dolarcitos. ¿Será ese el símbolo que estan buscando para representar la nueva nación?

31 marzo 2007

ENTRE ARQUEOLOGOS Y CAPATACES: A propósito del artículo"La Investigación y el Trabajo Arqueológico en Bolivia"


El domingo 25 de marzo del 2007, salio publicado en el segmento “Fondo Negro” del matutino La Prensa de la ciudad de La Paz, un artículo que titula “La Arqueología en Bolivia, huérfana de todo”, que resume bastante bien los comentarios, reclamos y críticas que emiten los arqueólogos Claudia Rivera, Jedú Sagarnaga y José Luís Paz. No obstante el artículo comienza con una afirmación errada que indica que “Reconstruir la historia de las antiguas culturas, conocer detalles, modos y avances- la esencia, la definición básica de la arqueología- en Bolivia”, pues el fin de la arqueología no es en sí reconstruir la historia, sino tratar de entender el pasado a través de sus restos materiales y este entendimiento no es de ninguna manera único ni final.
Sagárnaga menciona que el “grueso” de los sitios arqueológicos se encuentra en el área “rural” y que el arqueólogo debe desplazarse hasta lugares muy alejados. Probablemente esto no es del todo falso, pero debemos recordar que tanto La Paz, Cochabamba, Santa Cruz y Tarija se hallan emplazados sobre extraordinarios complejos de asentamientos arqueológicos y que la práctica arqueológica no se hace únicamente a través del trabajo de campo (mayor comentario en Lucas 2001).
Por otro lado Rivera indica que “hacer investigación en Bolivia no es una tarea fácil, pues no existen las condiciones mínimas de apoyo a esta labor”, esto es totalmente cierto, pues el estado y las universidades no sólo que apoyan muy poco la investigación, sino que en muchos casos la desalientan (ver las discriminaciones que hacen el Fondo de Culturas del Viceministerio de Desarrollo de Culturas o el propio PIEB).
El que “no se hayan incorporado especialistas a los trabajos de excavación y análisis” como menciona José Luís Paz, es justamente porque no contamos con estos especialistas y probablemente no los tengamos en mucho tiempo, pues no tienen cabida con el actual incentivo que brinda el espacio de trabajo e investigación. En esto muchas de las pomposas presentaciones que hace el Director de la UNAR en sentido de que en AKAPANA se trabaja con los mejores arqueólogos de Bolivia y que se hace un trabajo especializado es simplemente una gran Falacia, que no aguantaría la mas superficial de las indagaciones.
Por ejemplo, gran parte de quienes trabajan en Akapana, cumplen las funciones de meros capataces de cuadrilla que supervisan los trabajos de remoción de tierra, a partir de los cuales se pretende exponer la pirámide como un simple monumento arquitectónico y no como el producto de una compleja dinámica social, económica, cultural y tecnológica que demandó cientos de años.
Se dice que “la mayoría de los arqueólogos en el país no cuentan con trabajo fijo”, no sólo es eso, la mayoría se encuentran dentro de la categoría de “desempleo absoluto”, lo cual es totalmente desalentador para quienes incluso hacen esfuerzo por conseguir una especialización o doctorado, porque este merito académico ni la propia Universidad lo reconoce en su justa dimensión, mucho menos la UNAR, donde el haber cursado el tercer semestre de arqueología es suficiente mérito para asumirlo como “Arqueólogo” o “Experto” y colocarlo en Akapana ganando un humillante salario.

Turismo

José Luís Paz indica que lo que hasta ahora se ha hecho en el tema de aprovechamiento del patrimonio para el turismo es improvisado y que no todas las comunidades que demandan explotar sus vestigios arqueológicos pueden hacerlo con perspectivas económicas viables, lo cual es absolutamente cierto. Mientras que Sagárnaga apunta que “la puesta en valor de sitios arqueológicos, la construcción de museos de sitio y la apropiada gestión de los recursos culturales pueden ser la tabla de salvación para muchas comunidades rurales, hoy en día depauperadas”, lo cual es en cierta manera falso. No se hace desarrollo rural con lo que algunos arqueólogos denominan “Museo de sitio” , que en realidad es un cuarto que funge como almacén de materiales arqueológicos, cuya “irresponsabilidad” es endilgada a la “comunidad” bajo figuras que legalmente son impracticables, pues las únicas entidades que pueden administrar el patrimonio son el Viceministerio de Desarrollo de Culturas, las prefecturas o los municipios. Estos almacenes, que nadie visita (ver estadísticas de visita de la mayoría de ellos) no generan ningún ingreso significativo para la población y no les reporta ninguna actividad económica adicional. Probablemente Pariti tenga posibilidades de ser la única excepción en este sentido, pero el resto, incluido Chiripa, Taraco, Huari, Quillacas, Aucapata y otros, son un reverendo fracaso. Desarrollar turismo en una región demanda generar capacidades locales, infraestructura de servicios, interrelación con todos los actores económicos (públicos y privados), desarrollar inversiones empresariales y establecer alianzas estratégicas de mercado para el desarrollo de productos turísticos que sean económicamente sostenibles.
Universidad Mayor de San Andrés
En cuanto que el Instituto de Investigaciones Arqueológicas y Antropológicas de la Universidad Mayor de San Andrés estuviera empezando a surgir, creo que esto es un error. Este se inició con mucha expectativa, pero en la actualidad se halla totalmente estancado y sumido en una profunda crisis, producto de las malas gestiones de sus sucesivos directores. De superarse este mal momento, podría ser una real alternativa para los arqueólogos que tienen la capacidad y la motivación para hacer investigación.

12 febrero 2007

BUENOS NEGOCIOS, ¿BUENA ARQUEOLOGIA?


Entre los años 2004 y 2006 fue implementado el Harvard Summer Program in Tiwanaku, Bolivia, como uno de los muchos programas organizados por la Harvard Summer School, el proyecto fue diseñado como parte complementaria al curso ANTH S-170 Field Methods in Andean Archaeology: the Harvard Field School at Tiwanaku, Bolivia; en el cual participaron estudiantes de pregrado incluso de 18 años. Cada estudiante pago $us 6.550 por gastos de tutoría, alojamiento, alimentación y gastos de campo, además de $us 50 por la aplicación y $us 110 para el de seguro de salud. En total cada estudiante depositó $us 6.710, sumando un total de cien mil dólares estadounidenses para costear 6 semanas del programa de una escuela de campo estimada para 15 principiantes. El proceso de enseñanza contempló excavaciones dentro del centro arqueológico de Tiwanaku, a escasos 200 metros del templete semisubterráneo, sobre uno de los emplazamientos más importantes, mejor conservados y de mayor antigüedad de Tiwanaku (100 a.C – 500 d.C), ubicado cultural y cronológicamente como perteneciente al Formativo Tardío.
La experiencia de Harvard fue una flagrante violación del Reglamento de Excavaciones en sus Artículos 9, 10, 12, 14 y 27, pues ninguno de estos estudiantes contaban con la licencia ni la calificación mínima para intervenir un sitio de primer orden como Tiwanaku, ni áreas tan preciosas para la investigación arqueológica del Formativo Tardío como Lakkaraña.
Muchos de nosotros recibimos la noticia de la implementación de esta escuela de campo con extrema sorpresa, pues el tamaño de la irresponsabilidad de quienes aprobaron este proyecto fue solamente equiparable al monto de dinero que recaudó. Hasta la fecha no se conocen los resultados, pues no han surgido publicaciones de tal empresa, y queda al tiempo la duda de sí, un grupo de jóvenes adolescentes, sin ninguna experiencia de campo, a cargo de otros estudiantes de doctorado (también sin experiencia) pudieron hacer un buen trabajo en un área tan importante de Tiwanaku como Lakkaraña. Lo que si sabemos, sin lugar a ninguna duda, es que fue un excelente negocio.
En una conversación sostenida recientemente (en predios del Viceministerio de Desarrollo de las Culturas) con altos responsables de la Unidad Nacional de Arqueología, se nos dijo: que en el mundo real, quienes tienen la plata definen que tipo de arqueología se hace en Tiwanaku, que a entidades como Wiñaymarka, la CBN o SOBOCE, poco les interesa el rigor metodológico con que se excave, que sólo les interesan los resultados que se pueden ver y vender, que con ellos es muy difícil “negociar”. Que esta difícil relación con las poderosas y caritativas empresas privadas se debe a que el sector cultural del estado es extremadamente pobre (porque así lo determinan los sucesivos gobiernos de turno, ¡sin excepción!), donde “sus arqueólogos” ganan poco menos de mil bolivianos por mes y deben sobrevivir con los excedentes que les reporta los viáticos que obtienen de estos proyectos.
¿Será ésta la política de dignidad que el Gobierno actual esta tratando de impulsar? ¿Será que con un apropiado fajo de billetes o algo de influencia política, es posible negociar, no sólo la posibilidad de destruir un determinado patrimonio arqueológico, sino también la vigencia y aplicación de la Leyes?. Probablemente la Cervecería Nacional, SOBOCE, el proyecto de escuela de Campo de Harvard, algún diputado oficialista cocalero o el propio Prefecto de La Paz nos den muy buenas luces sobre estos aspectos.




LOS DERECHOS DE AUTOR EN LA PRÁCTICA ARQUEOLÓGICA BOLIVIANA


Hace unos días llego al correo de la revista de Arqueología “Nuevos Aportes” una nota remitida por un arqueólogo amigo - oriundo de Cochabamba - que actualmente reside y trabaja en España. Tuve la suerte de conocerlo en el Valle a mediados de los años 90, lo mismo que a muchos otros investigadores y arqueólogos cochabambinos amigos del Museo Arqueológico de la Universidad Mayor de San Simón.
La nota se centra en una reciente denuncia de plagio interpuesta contra varios investigadores del Museo de Investigaciones Antropológicas de las universidades de San Simón de Cochabamba y Chapel Hill de Carolina del Norte, EE UU. El problema se suscitó sobre un aparente uso y apropiación de datos e informes de investigación inéditos por parte de ex - colegas de trabajo y coautores de los citados informes. Este hecho se habría consumado en algunas de las recientes publicaciones del Museo Arqueológico de San Simón. El destinatario de esta denuncia es una entidad internacional que trata estos temas, aunque lo más apropiado hubiese sido que la denuncia fuera efectuarla en las instancias nacionales que existen para tal efecto, existiendo además una Ley y sus reglamentos (Ley 1322 del 13/4/92) que protegen los derechos de autor.
Muy pocos hechos denunciados como plagio han sido reportados en la arqueología local, recuerdo algunos muy publicitados como el denunciado a un ex director de la DINAR y de la Carrera de Arqueología o a la acusación mutua que se dio entre los codirectores del Proyecto Arqueológico Iwawe. Probablemente existan algunos casos más que nunca fueron reportados y que permanecen sólo en los archivos de quienes incurrieron en el delito y en la memoria de quienes fueron afectados (a estos últimos, me adhiero personalmente).
Algunos arqueólogos e investigadores usan estos y otros antecedentes para justificar su improductividad intelectual o generar obstáculos para el acceso a informes de investigación y/o consultorias arqueológicas, cuyos datos son importantes para el avance de mayores investigaciones académicas.
Una de las justificaciones más usadas para evitar visibilizar informes de arqueología de contrato (que son parte de diversos estudios ambientales) es que su publicación o difusión a terceros, requiere de la aprobación previa de la empresa que la contrató o de la que estuvo a cargo del estudio ambiental. Se dice que estos arqueólogos, a tiempo de aceptar el trabajo, firmaron una cláusula de cesión de sus derechos de autor, lo cual no parece verídico, dado que vulneraría la Ley de Derechos de Autor que en su Título IV, Cap I, Artículo 14 indica que “el autor tendrá sobre su obra un derecho perpetuo, inalienable, imprescriptible e irrenunciable”.Por otra parte la Ley establece las garantías necesarias para que cualquier producto creativo artístico o intelectual, inédito o publicado goce del amparo de la Ley con respecto a sus derechos, motivo por el cual es censurable el clasificar, restringir o prohibir el acceso de investigadores a documentos que tienen carácter público como las investigaciones efectuadas en el marco de entidades estatales relacionadas con la arqueología, universidades públicas como la UMSA, museos municipales o estudios ambientales preparados bajo encargo exclusivo del estado, mucho más, cuando el objeto de estos estudios se efectúo con dinero estatal, sobre patrimonio del estado y bajo condiciones claramente estipuladas en la reglamentación vigente.

10 febrero 2007

POLÍTICAS CULTURALES, DESARROLLO LOCAL Y PATRIMONIO ARQUEOLÓGICO


La arqueóloga boliviana María de los Angeles Muñoz ha publicado recientemente un interesante aporte para la revista mexicana del INAH "Diario de Campo", Cuadernos de Antropológia y Patrimonio Cultural N 4, en el que hace una aproximación teórica y propuesta de modelo en torno al tema de Gestión Cultural. Este trabajo puede ser considerado como una reflexión pionera en nuestro país respecto del aprovechamiento de recursos culturales arqueológicos para el desarrollo local.

La visión de que el arqueólogo es sólo un técnico que recupera información y materiales del pasado requiere necesariamente ser desterrada, pues la practica arqueológica actual y sus resultados tienen una incidencia cada vez mayor en nuestra vida política, cultural y económica y los arqueólogos, no sólo estamos ocupados de las evidencias y vestigios del pasado, sino tambien de las implicaciones éticas, sociales, culturales, económicas, legales y políticas que encierra nuestro trabajo y sus resultados

Estudios como los de Maria de los Angeles nos mueven ha reconocer la necesidad que tenemos de arqueólogos que se especialicen en la gestión del patrimonio, en la construcción de políticas públicas o en la generación de propuestas teóricas en relación al papel que juega o debe jugar la arqueología en el actual contexto social.

08 febrero 2007

ARQUEÓLOGOS DE VERANO


Desde hace algunos años la carrera de Arqueología de la UMSA viene implementando cursos relámpago que duran menos de un mes, habilitados entre el intersticio que permite el final de un semestre y el principio de otro. Estos cursos son llamados "de verano", cuyos objetivos, cuando se implementaron en otras carreras, a principios de los años 80, fueron el de permitir la nivelación de estudiantes que acusaban retrazos por efecto de cambios en las curriculas o como premio para quienes obtenian exelentes notas y cuya caopacidad les permitia adelantar su egreso. Sin embargo, estas materias eran dicatadas por los mismos docentes que impartían las clases regulares y se daban en períodos de dos a tres meses. En aquel tiempo era poco probable que fueran aceptados aquellos que no contaban con los prerequisitos necesarios o venian de reprobar la materia en un curso regular.

Hoy la Carrera de Arqueología de la UMSA hace todo lo contrario, habilita estos cursos para los peores alumnos, o para aquellos que no pueden aprobar la materia con las exigencias regulares. ¡Claro esta, la dictan tambien "Arqueologos de Verano"!, que no dubitan en aceptar materias, cuyo contenido es obvio que no se puede impartir en 15 o 20 dias. Lo que pasa entonces es que se prescinde de la mínima lectura especializada, del análisis, la reflexión, la presentación de trabajos o monografias finales y de todo recurso que da sustancia a curso universitario que puede preciarse de algún rigor académico.

En estos últimos años (incluido el que comienza), la nueva política de los directores de carrera, y hago énfasis en lo "político", los afana por granjearse la simpatia de un número creciente de estudiantes "del mínimo esfuerzo", quienes imponen el lanzamiento de cada vez más cursillos de verano que los lleve rápidamente a egresar, aún a costa de una formación totalmente deficiente. Egreso, que en muchos casos, no les sirve mas que para habilitarse de mano de obra barata en excavaciones implementadas por el estado, la empresa privada o algún proyecto extranjero. Con suerte, estos arqueólogos no licenciados, 5 o 10 años despues de egresar, podran habilitarse a un PETAE que los salve de el "infierno laboral" que significa estar entre el egreso y la licenciatura. Infierno que probablemente tambien podra salvarse con el apoyo remunerado de algún otro "Arqueólogo de Verano".

Lamentablemente, nuestra formación arqueológica universitaria está en manos de una "Carrera de Verano" con contenidos, dirección, docentes y estudiantes de verano que promete, paradojicamente, un largo y gélido futuro invernal para la arqueología boliviana.


07 febrero 2007

LOS CAMINOS DE LA COCA


Estudios etnohistóricos y arqueológicos han mostrado, con distinto tipo de evidencia, que los antiguos caminos prehispánicos como el de Takesi, Choro, Yungacruz, entre los más conocidos, sirvieron como via para los intensos vínculos de tráfico e intercambio de productos entre las zonas bajas y altas del territorio amazónico y andino, principalmente coca, plumas, plantas medicinales, animales, frutas y diversos productos de altura como papa, quinua, cañahua, charque de llama, sal, etc.
Hoy estos caminos sirven fundamentalmente para el movimiento de turistas nacionales y extranjeros (que según estadísticas del año 2004 alcanzaron a poco más de 6000) y esporádicamente para el movimiento de la población local. La coca y productos exóticos o alimenticios no forman ya parte de la economía a la que sirven estos caminos, pues algunos de estos productos - como la coca - han multiplicado su importancia económica y disminuido radicalmente su significación ritual e ideológico (ambos procesos alentados por la poderosa influencia de la sociedad occidental) y utilizan para su movimiento los caminos carreteros que penetran a Sud Yungas, Nor Yungas, Alto Beni y las nuevas zonas de colonización.
Las poblaciones actuales de los Yungas estan demandando caminos alternativos a los existentes, que permitan movilizar los productos con menos riesgo que el que actualmente tienen. Algunos de los trazos planteados para estas nuevas vias pasan por la inminente destrucción de los antiguos caminos prehispánicos declarados Patrimonio y Monumentos Arqueológicos Nacionales, tal es el caso del Camino Chuñavi - Chulumani que viene siendo alentado por productores cocaleros y autoridades municipales que pertenecen a este gremio. La Prefectura ha respondido positivamente a esta demanda sin evaluar apropiadamente su factibilidad técnica o las consecuencias ambientales y culturales que promoverian estas iniciativas. De manera política y demagógica el Prefecto paceño se ha comprometido con estas poblaciones yungueñas sobre la base de unos cuantos dólares y la disposición de colocar un par de tractores para que abran una brecha, sin importar si esta destruye o no el camino prehispánico de Yunga Cruz, probablemente dejando esta decisión a los operadores tractorístas.
Las Sociedad de Arqueología de La Paz, las organizaciones de defensa del Medio Ambiente y en algún Momento la Unidad Nacional de Arqueología se opusieron tenazmente a que se efectivice su construcción sin la existencia de un estudio completo de factibilidad y su respectiva licencia ambiental, logrando detener su inicio por casi 6 meses. Sin embargo, presiones políticas, tráfico de infuencias e incentivos económicos poco transparentes están amenazando con fracturar las posiciones de defensa de este importante Patrimonio Arqueológico y Natural, vulnerando tambíen la normativa ambiental y cultural vigente, dando luz verde a la decisión de ejecutar -de la manera más precaria - una senda que impactará irreversiblemente el camino prehispánico de Yunga Cruz, su entorno y su actual y potencial aprovechamiento turístico.


Los antiguos caminos prehispánicos: La coca fue uno de los principales motivos
para su construcción y paradójicamente será uno de los principales motivos para
su destrucción.